Una vez dejada constancia de nuestro deseo para que se avance legislativamente en esta nueva legislatura, quiero empezar con un tema puntual, aunque no menor, señora ministra. Usted puede decirme que le planteo un asunto muy puntual que afecta a poca gente, pero no es verdad: ni es puntual ni afecta a poca gente, sino que es importante desde el punto de vista de justicia social.Quiero empezar con una cuestión que usted conoce, que me habrá oído a mí, porque fui un poco la gota malaya en el Congreso, ya que fue el caballo de batalla de este parlamentario en las últimas legislaturas. Quiero dejar constancia también en el Senado de mi preocupación por la situación de los soldados (La señora ministra de Defensa, Chacón i Piqueras, hace gestos afirmativos.) -la señora ministra asiente y ya sabe a qué me refiero- del Sáhara-Ifni. Hace cincuenta años un grupo de jóvenes -hoy abuelos, muchos de ellos ya fallecidos- fueron enviados, obligados por el Gobierno franquista a un enfrentamiento bélico en una zona inhóspita. Me refiero a los soldados del Ifni-Sáhara. Cincuenta años, señora ministra, de un injusto olvido: olvidados por el franquismo, olvidados a la llegada de la democracia y olvidados por todos los gobiernos (UCD, PP, PSOE). Estos soldados -cada vez menos- llevan medio siglo pidiendo que sean recordados y reconocidos. Hasta hace poco, nada de nada, el desierto, el mismo que encontraron en el Sáhara.Por suerte, el año pasado Convergència i Unió consiguió, con el apoyo de los grupos parlamentarios del PP, PNV, Mixto, etcétera, introducir primero una proposición no de ley y después una enmienda en la partida de los Presupuestos Generales del Estado donde se fijaba la cantidad de un millón de euros para empezar a indemnizar a los veteranos del Ifni-Sáhara. Fíjese bien, señora ministra, no piden una pensión vitalicia, sino tan solo cobrar una vez una cantidad que les reconozca su labor y su sufrimiento, igual que han sido indemnizados otros soldados que han hecho actuaciones internacionales en los Balcanes u otros sitios, que han recibido su paga de reconocimiento. Ellos piden lo mismo.Mis preguntas son las siguientes. En primer lugar, ¿se ha pagado el millón de euros a los veteranos de la guerra del Sáhara-Ifni? Ya le contesto yo: no. ¿Se piensa, en estos pocos meses que nos quedan antes del 31 de diciembre, iniciar el pago de este millón de euros, que fue un pacto político entre CiU y el partido en el Gobierno? En segundo lugar, y esto ya le compete más a usted, ¿piensa completar este primer pago con una partida aproximada de 8 millones de euros en los próximos presupuestos del Estado? Señora ministra, piense que en esta Cámara las mayorías son diferentes a las del Congreso, y del Partido Popular hemos recibido apoyo reiterado en este tema. Le pido que no tengamos que volver a enmiendas no deseadas.Le solicito que esta cuestión no muera como algunos ex soldados que van muriendo poco a poco -es verdad que quedan pocos-, y no se den cuenta de que es cierta la expresión acuñada por algún periodista que dijo que esta era la guerra olvidada.Le ruego, señora ministra, que nombre a un responsable en el ministerio que sea quien vehicule el diálogo con este colectivo, con estas asociaciones existentes y que usted, que es persona que conoce la realidad social, sepa que esta es una injusticia que tiene España con gente de todo el Estado. En cualquier autonomía del Estado encontrará a alguna persona muy mayor, a algún enfermo o a alguna familia que tiene alguna persona que ha estado allí que cada día mira en los medios de comunicación si finalmente se le reconoce su prestación obligada en una guerra o conflicto bélico.Permítame que, para acabar este tema, haga un reconocimiento a tantos y tantos ex soldados que están luchando de manera pacífica desde hace cincuenta años para ser reconocidos, y en especial a don Josep Riatos, presidente del grupo de Transmisiones IV, que con su constancia y su insistencia hizo concebir en este senador, en Convergència i Unió y en otros senadores de otros grupos la necesidad de reparar esta injusticia social. Hace pocos días, en el mes de junio, celebraron el 50º Aniversario, y uno de ellos, Josep Damiá Cala, hizo una pequeña poesía que decía: (El señor senador continúa su intervención en catalán.) En su poesía sigue diciendo -lo diré en castellano-: Y se descuelga en poca solta -en castellano con poca sustancia- en el Congreso de los Diputados comparando la guerra Ifni-Sáhara con unas maniobras militares.
